Trabajos que los brazos robóticos pueden hacer hoy en día
Hasta no hace mucho, cuando alguien decía la palabra “robot” lo más habitual era que estuviera hablando de una obra de ciencia ficción. No obstante, el progreso tecnológico y el trabajo de los mejores ingenieros del mundo, ha hecho que esto deje de ser así y que los robots ya formen parte de nuestra realidad. Esto se hace especialmente evidente dentro del contexto industrial, donde muchas empresas se han animado a incorporar sistemas como los brazos robóticos para optimizar sus procesos cotidianos. Unas herramientas automatizadas que cumplen con un gran volumen de trabajos. ¡Te contamos algunas de las tareas más recurrentes para los robots industriales!
Procesos de soldado
Soldar es un proceso de lo más habitual en las cadenas de montaje y, por ende, es de agradecer que ya haya sistemas roboticos capacitados para llevar a cabo esta tarea. Una función que se puede integrar en los brazos robot mediante una programación muy sencilla, controlando al detalle la producción de todo tipo de artículos.
Debes saber que, a diferencia del equipo humano, estas máquinas no cometen errores en el desarrollo de sus trabajos. Todo lo contrario, mantienen una dinámica impecable en términos de rendimiento para así acelerar al máximo cada tarea pendiente. ¿El resultado? Los procesos de soldado se harán hasta cuatro veces más rápido.
Optimización en las cadenas de montaje
A coalición de lo anterior, conviene comentar que los robots industriales juegan una baza fundamental en las cadenas de montaje. No obstante, no solo intervienen en el soldado de las piezas, sino que también se encargan de hacer circular todos los elementos que se van a llevar de una estación a otra. Algo que se traduce en una mejora de la gestión del tráfico en estos espacios. Por tanto, hablamos de un recurso clave en toda industria, ya que incentiva en gran medida el rendimiento de la producción.
Mover cargas de un lugar a otro o paletizar los artículos en cuestión, son algunas de las funciones más relevantes en dicha materia. Una solución que, además, suele destacar por lo compacta que resulta.
Escaneados de primera calidad
Organizarse es fundamental si se pretende mantener un buen índice de rendimiento industrial. Si el caos abunda en la nave, las pérdidas de tiempo están aseguradas. Por ello, es de agradecer que los brazos robots tengan integrados sistemas de escaneado que optimizan en gran medida la logística del lugar. Es decir, cada artículo que pase por la línea de montaje o cadena de suministro irá a su sitio gracias a dicha tecnología.
Por si esto fuera poco, los robots también escanean los artículos con el objetivo de llevar a cabo controles de calidad. En caso de detectar algún fallo en el producto, superando incluso las capacidades del ojo humano, el sistema dejará constancia informática de ello y se encargará de destinar el objeto defectuoso a su lugar correspondiente.
Tareas repetitivas de todas las características
Llegados a este punto, ya habrás podido observar que los trabajos de los robots son generalmente repetitivos y presentan un bajo valor añadido. No obstante, esto no significa que no tenga efectos positivos sobre la empresa: todo lo contrario, son sistemas esenciales en los tiempos que corren.
Pongamos el ejemplo del atornillado. En lugar de obligar a los operarios a adoptar posiciones incómodas (que pueden repercutir en su salud) y tenerlos siempre haciendo lo mismo, ahora se puede delegar dicha labor en un robot. Ellos lo harán incluso cuando la fábrica esté cerrada, dinamizando la producción y obteniendo resultados precisos en todos los casos.
La rentabilidad por encima de todo
Nos queremos despedir hablando de un tema que, si bien no es una función en sí misma, sí se trata de un elemento esencial a la hora de valorar esta inversión. La rentabilidad de los robots es sustancial y se plantea como un elemento muy a tener en cuenta.
Así pues, no dejes que el paso de los años haga que tu empresa se quede obsoleta. Da un paso hacia el futuro y apuesta por estos sistemas, los cuales se amortizan con una rapidez arrolladora. ¡La robótica ya es el pan de cada día de las industrias!
